Se están prefabricando estándares culturales que tienen como leitmotiv la desestructurización de la familia, la polarización y el aislamiento, la ridiculización de los valores tradicionales, y la ponderación de la imagen, la validación existencial en relación a la opinión extrínseca, lo superfluo prima sobre lo profundo, y además se generó una política populista del “buenísmo”, que abogando por supuestas causas nobles trabaja en detrimento de estas…
Los mismos que promueven salvar al planeta son los que auspician los agrotóxicos, los mismos que promueven el veganismo son los que se benefician con la carne sintética, los mismos que promueven energías limpias son los que viajan en jets privados, y así una larga cadena de contrariedades pasan inadvertidas pues el foco de los grandes medios se centra en el vídeo de Shakira o en si Moria tiene celulitis…
Con una venda invisible en los ojos vamos alegremente hacia el totalitarismo siendo al mismo tiempo sometidos y sometedores, porque hoy más que nunca pensar distinto es peligroso, se avala la censura del que opina diferente, se promueve abiertamente el odio al que no se adapta a este modelo cultural que florece abonado por intereses económicos a lo largo del mundo sin la resistencia de los seres pensantes… que escasean…
Algo nos está sucediendo como sociedad que omitimos enfrentar a quienes nos destruyen, y está inacción está dilapidando nuestros recursos más valiosos, estamos viendo caer como simples espectadores de una película de ficción los cimientos que sostienen el entramado social: la familia sobre todo como enraizante del individuo, como faro de luz en la oscuridad.
No consintamos perder sin un gesto de valentía lo que nos es más valioso… no temamos reivindicar los valores que ancestralmente nos definen y nos nuclean.
No nos dejemos invadir por este avasallamiento cultural que tratan de imponernos. Es hora de confraternizar, es hora de unir voluntades y hacer uso de nuestro recurso más valioso que es la libertad de disentir y hacer valer nuestro propio criterio.
Es hora de atreverse a ser nosotros mismos y a postular nuestra propia independencia cultural.
Mónica Gerez.
“Algo nos está sucediendo como sociedad que omitimos enfrentar a quienes nos destruyen”. Hoy leí una noticia que me dejó estupefacta. Hubo un gran incendio en el Cerro del Toro en Piriápilos. Compramos un avión Hércules C 130 que no se usó para apagar el incendio sino que una empresa particular lo utiliza para “saltar en paracaídas” desde ese avión QUE ES NUESTRO. O sea que se usa para RECREO. No sé quiénes desarrollan ese negocio pero la pregunta es ¿CÓMO NO ENFRENTAMOS A QUIENES USAN NUESTROS BIENES PARA GANAR DINERO?